domingo, 2 de enero de 2011

Quisiera en mi vida un sol...




Quisiera en mi vida un sol

Que me protegiera de las lágrimas...
Que me protegiera de mis sueños...
Que me protegiera de la tristeza...
Que me protegiera... de mi misma ...


Que me protegiera del pasado
Que me protegiera del presente
Que me protegiera en el futuro
Que me protegiera de sí mismo


Quisiera que el mismo sol...
Entibiara mis noches y...
Calentara mis días e
Incendiara mis...  momentos


Quisiera que el mismo sol
Deseara ser protegido
Anhelara ser amado
Disfrutara ser consentido


En el sueño de mi sol
Quisiera estar solo yo...
En la vida de mi sol
Quisiera compartir todo
En la casa de mi sol
Quisiera poner el orden
En el pasado de mi sol
Quisiera poner el hombro


Y quisiera que ese sol
No se apagara nunca
Y si acaso se apagara
Me hiciera solo un favor


... después de apagarme yo ...






Poema sin poeta... de Josie
Marzo 1998




sueñus interruptus?


Estaba descansando plácidamente en mi sofá, un domingo por la mañana… me quedé dormida viendo una peli de sábado por la noche… cuando con los ojos entrecerrados….vislumbre una silueta que a través del visillo de la ventana espiaba…. está en un 7º piso, así que pensé en marcar el número de emergencias pero no acerté a moverme… me quede quieta…
Me quede un poco lacia… fingiendo estar desmayada…y de repente vi un fogonazo…una luz extraordinariamente brillante me cegó…. pero me preguntaba cómo podía ser eso si tenía los ojos cerrados
Sentí como si flotara... subí por encima de todo… y entonces vi toda la escena, yo estaba ahí en el sillón con un pequeño hilo escurriendo por mi boca, una mancha negra en la sien y entonces me acordé que no me había desmaquillado y pensé que era de rímel seguramente.
De pronto vi como alguien salía corriendo por la puerta y entonces le seguí, vi como corría y enseguida se escucharon las sirenas, era la policía, o la ambulancia de emergencias, pero no yo no las había llamado o sí?
En fin que me preocupe por ver donde se metía el hombre que corría, corría como si llevara alas en los pies, por los suburbios… entró a un coche que tenia los cristales sucios o eran tintados?, no podía verle pero de pronto estaba ahí, sentada a su lado… el sudaba las gotas perlaban su cara y… giró la cabeza y me miró, pensé que se sorprendería pero no, solo me dijo,  casi sin voz, “estoy seguro que no te di, pero si estás aquí es que te di verdad?”
Y yo que ni siquiera sabía dónde estaba ni como había podido alcanzarle, sin sofocarme, le sonreí y me di cuenta de que era un jovencito, apenas llegaría a los 17 y en el momento en que le miré la cara, vi el miedo reflejado en su rostro, estaba asustado… creo que yo era la primera…
Regresé inmediatamente a mi casa y vi mucha gente en la puerta patrullas y ambulancias y luces por todos lados, y sirenas, vi cuando en una camilla con papel dorado encima sacaban a una persona y me preocupé… ¿que habrá pasado? me preguntaba, pero inmediatamente me acerqué y pude ver la cara de… ¿él cadáver?
NO! no era cadáver porque la cara estaba descubierta así que cuando me vi ahí …comprendí lo que había pasado…
Me aferré a no perder de vista la ambulancia y cuando llegaron a su destino –un hospital de las cercanías- entonces…sentí un pinchazo…y otro…y golpes en el pecho… y gritos a mi alrededor… y palabras de esas que dicen los médicos cuando quieren salvar la vida de  alguien…”de prisa 2mg de …ina…y 3 mg. De …ina  etc. Etc. “ unas palabras que precedían a mas pinchazos…
Inmediatamente después… nada… silencio… estaba echada en una superficie húmeda y muy cómoda, deslicé mi mano para coger un poco de aquella cosa suave y eran pequeños granitos que salían a chorros por entre mis dedos, sentí que mis pies se mojaban y luego mis muslos…y así hasta que cada vez que se movía mi cuerpo… me mojaba mas y… agh! Que sensación mas ¿desagradable?….sal!!...agua y sal!!… estaba siendo arrastrada por las pequeñas y tranquilas olas de una playa desierta… ay qué alivio!….pensaba que estaba muerta y no… estaba en la playa y entonces fue cuando escuché una voz …muy suave… murar cerca de mis oídos… dentro de mi cabeza… me decía… “ven levántate que aun tienes muchas cosas que hacer”… y me quedé dormida… plácidamente… arrullada por las olas… suaves y tranquilas…
Creo que estoy sola en la playa… me levanto y empiezo a caminar, cuando de pronto unos gritos me despiertan… mamá!… mamá!… un niño corría hacia mí, me llamaba mama?, no recordaba haber tenido un hijo, pero el parecía seguro de que yo era su madre, al llegar junto a mi me abrazó y su cabecita quedo a la altura de mi estómago… sentía su cuerpecito pegado al mío… palpitaba… sentí que le mojaría su ropa y lo separé de mi unos centímetros para ver su cara… esa cara la conocía, la había visto hacia poco tiempo… con mucha angustia y miedo reflejado en su rostro transpirando y agitado… pero no lo recordaba claramente mis pensamientos estaban muy revueltos … me sentía confundida, pero esa carita sonriente reclamaba mi atención…
Hola mamá, estas bien?,  quise contestar pero tiraba de mi con sus manitas… me llevaba a rastras casi, con su pequeño cuerpo tiraba del mío… y yo le seguí… hasta una cabaña… hermosa… rodeada de plantas… y hortalizas… ¿era mi casa?… ¿esa casa soñada tantas veces?.
No, esa no era mi casa… algo no encajaba con mi casa soñada, noté que no había nada eléctrico… nada, el fuego era una especie de caja de madera llena de ceniza… con una piedras grandes a manera de parrilla… una olla negra por el humo, estaba en el centro de la habitación una especie de plato enorme colgado al techo y dentro de esa especie de plato enorme hecho algo que parecían ramas de árbol, lleno de comida, frutas y pan… recorrí de inmediato la habitación…era una sola… con una especie de biombo detrás del cual estaban las camas una grande y otra pequeña, y había algunas cosas más, una mesa 3 sillas de madera y el suelo era de tierra aplanada y húmeda, recién regada y barrida se veían las marcas de una escoba que estaba a la vista, era de ramas secas… atadas alrededor del extremo de un palo más largo… era como un instrumento de tortura, y luego más tarde lo pude comprobar, que si efectivamente… era una tortura arrastrar las hojas y los pequeños trozos de madera con ese instrumento destroza espaldas
Al recorrer todas...
Oh! Ladridos…
Guau! Guau! Guau! es Sira que ha decidido que es hora de interrumpir mi sueño y menos mal porque ya me estaba angustiando, vi el reloj y apenas habían pasado 10 minutos...

Lo malo de que te interrumpan cuando sueñas es que no puedes ir al sueño voluntariamente, así que jamás sabré si ese chico era mi hijo que al crecer me asesinaba, si esa casa era mi a o del vecino, menos mal porque era de las cavernas, y ahora mismo me preparo un café y me siento en mi terraza a tomar el sol y despejarme para intentar continuar esta historia… u otra